Introducción a la táctica (1): Conceptos básicos
Hola a todos! En la entrada de hoy vamos a hablar de algunos aspectos que nos han demandado mucho en los últimos años: la explicación de diferentes conceptos tácticos básicos que, a aquellos con menos conocimientos o experiencia, les cuesta comprender. Esta es la primera de una serie de posts que esperamos que les gusten y les ayuden a entender este bonito deporte.
El entrenador es el encargado de construir unos sistemas tácticos con el objetivo de coordinar de forma efectiva a las jugadoras y poder jugar en sintonía. Un equipo no puede jugar un sistema táctico más complicado que el que les permite el nivel técnico de sus jugadoras. El voleibol es un deporte muy complejo tanto técnicamente como en su reglamentación y es necesario una base sólida de conocimientos antes de imponer a nuestros jugadoras sistemas demasiado avanzados. Los sistemas de juego y las jugadoras deberán ir evolucionando de manera conjunta hacia la máxima complejidad posible.
Con respecto a los diferentes complejos, en la bibliografía especializada hemos podido encontrar hasta cinco tipos diferentes. Sin embargo, creemos que como introducción a la táctica y en etapas de formación tan sólo es necesario prestar especial atención a las dos principales complejos.
El complejo 1 (KI), o salida de recepción, está compuesto por las acciones que realiza uno de los equipos con el objetivo de neutralizar el saque del equipo contrario. Incluye las fases de recepción, colocación y ataque. La recepción del saque es el primer elemento del juego que tiene lugar dentro de la secuencia del KI, y es de vital importancia para la construcción de un ataque con éxito, pues sin una buena técnica y un sistema de recepción adecuado la calidad de esta será limitada y el balón no llegará a la colocadora en las condiciones idóneas para organizar un ataque eficaz.
El complejo 2 (KII), o reconstrucción defensiva, lo constituyen las acciones realizadas para conseguir el punto cuando el propio equipo está en posición del saque, comenzando con el bloqueo y la defensa y culminando con el contraataque. Por ello, en este complejo trabajamos las situaciones de bloqueo y defensa de nuestro equipo, para que trabajen de manera coordinada ante las diferentes situaciones que pueden darse durante el juego.
LAS POSICIONES EN EL CAMPO
El reglamento obliga a las seis jugadoras titulares a ocupar una zona determinada del campo antes de que el balón se ponga en juego mediante el saque. Tres de ellas se sitúan en la red (zona frontal), y sus principales funciones serán las de bloquear y atacar; las otras tres jugadoras se sitúan en la parte trasera (zona zaguera), y su función principal será defender.
Cuando un equipo obtiene el saque tras una salida de recepción, sus jugadoras están obligadas a efectuar una rotación en el campo en el sentido de las agujas del reloj. Todas ellas pasarán tanto por las zonas delanteras como por las traseras, a excepción de la líbero. Por esta razón, es importante que todas las jugadoras aprendan en las fases de formación todos los gestos técnicos que componen el voleibol, evitando una especialización temprana que limite las posibilidades de las deportistas en el futuro.
Para evitar las faltas de posición, es recomendable enseñarles a prestar atención a su situación con respecto a sus compañeras. Deben entender que tienen que conocer qué jugadora tienen a cada lado, así como, delante o detrás. Por ejemplo, la jugadora en la parte trasera izquierda (zona 5), debe prestar atención a la posición de la jugadora en la parte izquierda delantera (zona 4) y a la de al jugadora que está en el centro de la parte trasera (zona 6). En el caso del ejemplo, las faltas no se cometerían en relación con las compañeras de zona 3, 2 o 1.
En el caso de las jugadoras situados en el centro, ya sean delanteras o zagueras, deben prestar atención a las jugadoras a su derecha y/o a su izquierda, así como, al que se encuentra delante o atrás, según corresponda.
Cuando el equipo está preparado y comenzamos a trabajar rotaciones con especialistas (colocadora /opuesta, centrales/libero y receptoras), las rotaciones se pueden entender de manera algo más sencilla, pues en cualquier sistema táctico tendremos a cada lado a una especialista diferente. Además, es importante entender que las parejas del mismo puesto siempre deben estar colocadas en el campo en la posición más alejada la uno de la otra, de manera que siempre una de ellas esté en posición delantera y la otra en trasera.
Sin embargo, es importante no confundir las posiciones con los puestos o roles específicos de juego. Las jugadoras, tras el saque, pueden desplazarse y ocupar cualquier posición en la parte delantera o zaguera (dependiendo de dónde se encuentren). De esta manera, cada una se podrá ubicar en la zona de juego correspondiente. Por ejemplo, de manera habitual (aunque no es una regla), la colocadora cuando está en la parte zaguera (zonas 5, 6 o 1), se desplazará hacia zona 1 tras el saque; mientras que cuando está en la parte delantera (zonas 4, 3 y 2), se desplazará hacia zona 2.
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